27 Mar 2018
Más de 102 mil empresas
están obligadas a emitir comprobantes de pago electrónicos durante este año, de
acuerdo al plan de masificación de la SUNAT. La implementación de la facturación
electrónica en el Perú representa un cambio importante en las organizaciones
porque permite que sus sistemas contables sean más eficientes.
“Cada vez son más las empresas que comprenden
las ventajas y los beneficios de la facturación electrónica y muchos sin estar
obligados realizan la migración al sistema de forma voluntaria”, indicó
Verónica Velazco, jefa de Efact Sistema Integrado, producto que brinda Efact,
Operador de Servicios Electrónicos y Proveedor de Servicios Electrónicos (PSE)
autorizado por la SUNAT. “El ingreso al sistema electrónico permite
aprovechar una mejor gestión de los comprobantes de pago y las oportunidades
que brindan, como optimizar la rentabilidad del negocio”,
agregó.
Velazco precisó además sobre las sanciones que existen si uno no cumple
con la emisión de comprobantes de pago electrónicos en el caso de estar exigido
por el ente regulador. Señaló que las
sanciones para el emisor, por emitir un comprobante no válido, son el pago de una multa (hasta el 60% de
una UIT) o cierre, y se da de manera progresiva, según la infracción y el
tamaño de la empresa. La primera vez que haya una infracción puede ser hasta el
30% de una UIT, la segunda vez son 2 días de cierre, la tercera son 4 días de
cierre y la cuarta vez o más son 10 días de cierre.
Velazco precisó ciertos datos que se deben
saber sobre la facturación electrónica, entre ellos lo que debemos tener en cuenta para no caer en
las sanciones:
1.
Economiza: con
la implementación de la facturación electrónica se reducen los costos de los
procesos como impresión, traslado y almacenamiento. Solo en la emisión, el ahorro
por comprobante es alrededor de S/ 8.40.
2.
Agiliza
trámites: la facturación electrónica elimina gestiones manuales. Este
sistema viene de la mano con la inmediatez y eficiencia, pues se produce una
mejora considerable en los tiempos de entrega. Un comprobante físico debe ser
impreso y remitido con un mensajero, mientras que el digital es enviado como un
e-mail.
3. Acceso a productos financieros: permite el acercamiento a herramientas de financiamiento
como el factoring, usando la factura negociable, que brinda liquidez y capital
de trabajo.
4. Contribuye al cuidado del
medio ambiente: las organizaciones se vuelven
sostenibles con el intercambio de documentos electrónicos porque eliminan el
uso de papel. Por ejemplo, una empresa que deje de producir alrededor de 12,000
facturas al año evitará la tala de 57.6
árboles, la emisión de 14.4 toneladas de CO2 y el uso de 180 mil litros de agua.
5. Empresas obligadas: la SUNAT ha puesto a
disposición de los contribuyentes una
herramienta para verificar la
lista completa de empresas obligadas a ser emisores electrónicos. Si la empresa
está obligada y aún no realiza la migración al sistema electrónico
recomienda contactar con un proveedor autorizado. Si aún no está
obligada, recomienda que ingresen al sistema de manera voluntaria y anticipada,
ya que es parte del plan del ente regulador que todas las empresas lo sean.
6.
Proveedor
autorizado: se debe considerar que el proveedor ofrezca una solución
capaz de llegar y atender a todos, tanto emisor como adquiriente. Además, que
ofrezca productos a la medida de cada empresa y de las necesidades que tengan;
que no obliguen a gastar en equipos adicionales, y que dé soporte para
que la implementación de la facturación sea segura y sencilla.
7.
Evitar
los comprobantes de pago impresos: si una empresa designada como emisor
electrónico emite un comprobante de pago físico en lugar de emitir
electrónicamente, el documento no tendrá validez, salvo que el incumplimiento
se origine en un evento no imputable al contribuyente. Por dicha razón, el adquiriente no podrá hacer uso de
dicho comprobante como sustento fiscal.